EFICIENCIA ENERGÉTICA Profesionalizar la compra de energía para ganar en competitividad Photo by Campaign Creators on Unsplash Según datos de la última Encuesta de Consumos Energéticos, que el INE realiza cada dos años, el consumo energético de las empresas industriales alcanzó los 10.957 millones de euros en 2015. Los principales productos energéticos utilizados fueron la electricidad (56,4% del total), el gas (31,4%) y los productos petrolíferos (6,9%). Por rama de actividad, el consumo energético en la fabricación de productos farmacéuticos fue de 151.586.000 euros, un 1,4% del total; y por tipo de energía empleada en la fabricación de productos farmacéuticos, el 65,7% empleó la electricidad, un 21,7% el gas, un 7,2% productos petrolíferos y un 5,4% otros recursos. En cuanto a la importancia de los consumos energéticos, el porcentaje sobre el total de compras de bienes y servicios fue de un 1,6% en la fabricación de productos farmacéuticos. JAVIER DÍAZ RESPONSABLE DEL ÁREA DE LCONSULTORÍA DE ENERGÍA EN AYMING os datos del INE son una muestra más del peso de la industria farmacéutica en nuestra economía, aportando un 2% de la facturación de la industria en España. Embarcada desde hace años en proyectos encaminados a la reducción del consumo eléctrico y térmico a través de la eficiencia energética, uno de sus objetivos es mantener la competitividad. La energía verde ha sido desde hace años una de sus preocupaciones, en aras de la eficiencia energética y también por la flexibilización en algunas normativas del sector si el origen de la energía que emplean para la fabricación de sus productos era verde. A día de hoy, el consumo energético del sector farmacéutico supone un 2,6% sobre su producción y es una de las actividades industriales más sensibles a la variación de los precios de la energía (electricidad, gas y vapor). Los datos de la Asociación de Empresas de Eficiencia Energética A3e así lo atestiguan. Entrando en detalle, el consumo específico por unidad de producto sólido asciende a 0,4156 kWh/kg si hablamos de consumo eléctrico, y 0,0610 kWh/kg en el caso del gas, mientras que el consumo específico por unidad de producto líquido se sitúa en 0,221 kWh/litro para consumo eléctrico y 0,198 kWh/litro en gas. Por ello, todas aquellas acciones que se encaminen a la disminución del consumo energético y que no constituyan su núcleo de negocio son claves para garantizar su exitosa viabilidad en el medio y largo plazo, así como mantener sus márgenes. En este sentido, el sector de la fabricación de productos farmacéuticos ha contado históricamente con asesoramiento externo en consultoría de energía, costumbre que se ha incrementado en los últimos cinco años hasta llegar al día de hoy, en el que gran parte de las farmacéuticas que cuentan con procesos productivos en España, disponen de un consultor. Contar con un especialista en la compra de energía es fundamental para ellos, ya que el gasto medio de la energía de un fabricante de productos farmacéuticos oscila entre los 500 k/año y los 2.500k/año. La gestión profesionalizada de esta categoría siempre ha sido importante, pero en el turbulento escenario actual se convierte en esencial contar con la máxima información posible antes de tomar decisiones correctas y sobre todo evitar tomar las incorrectas. Después de varios años en los que, favorecidas por las tendencias de los mercados, las empresas farmacéuticas han podido reducir sus costes de electricidad, por primera vez se encuentran un escenario alcista de precios… y no cualquier escenario. Durante todo el segundo semestre de 2018, los clientes que hayan tenido que tomar decisiones sobre la contratación de sus suministros, lo han tenido que hacer en un mercado de futuros en máximos históricos, que ha llegado a los 65/MWh para el 76 energética XXI · 184 · MAR19
Energetica184marzo2019
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