La descarbonización de los edificios es uno de los grandes retos de la actualidad en la lucha contra el cambio climático. Teniendo en cuenta que los edificios son responsables de un 35% del consumo energético mundial y del 37% de las emisiones globales de CO₂, estos deben convertirse en un objetivo clave en la lucha contra el cambio climático. Es urgente transformarlos. No se trata solo de reducir emisiones, sino también de implementar una gestión energética eficiente y una digitalización avanzada que optimicen el consumo, mejoren la sostenibilidad y promuevan un futuro más respetuoso con el medio ambiente, en los entornos edificados. En este contexto, la combinación de gestión energética inteligente, descarbonización y digitalización emerge como la clave para el éxito.

La gestión energética como pilar
La transición hacia edificios más sostenibles requiere no solo la reducción de emisiones, sino también la optimización del consumo energético mediante soluciones avanzadas de gestión energética.

Las edificaciones comerciales y residenciales están comenzando a transformar sus estructuras mediante la electrificación de los sistemas de climatización y la integración de energías renovables. Además, se hace cada vez más necesario adoptar tecnologías que monitoricen, analicen y optimicen el uso energético. En ese sentido, los sistemas de gestión energética inteligentes, como aquellos impulsados por Schneider Electric, permiten tomar decisiones basadas en datos reales, facilitando la eficiencia de las operaciones y promoviendo el uso responsable de la energía.

La digitalización como aliada clave
La digitalización es el segundo componente que permitirá alcanzar los objetivos de sostenibilidad en los edificios. Hoy en día, tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT), la inteligencia artificial (IA) y el análisis de datos se han convertido en herramientas fundamentales para mejorar la eficiencia y la operatividad de las infraestructuras urbanas. La capacidad de monitorizar en tiempo real y gestionar el consumo energético a través de plataformas digitales permite no solo una mayor eficiencia, sino también la identificación de oportunidades de mejora.

Un aspecto clave de la digitalización es su capacidad para facilitar la gestión remota y el mantenimiento predictivo, minimizando interrupciones y optimizando el ciclo de vida de los activos.

Fases clave en la rehabilitación de edificios
Para descarbonizar edificios ya existentes, Schneider Electric recomienda una evaluación exhaustiva que permita identificar y priorizar las intervenciones necesarias, clasificadas en tres niveles: intervenciones ligeras, renovaciones medias y renovaciones profundas.

• Intervenciones ligeras: se centran en la implementación de soluciones digitales para la monitorización y la optimización del consumo energético. Estas acciones, como la mejora de sistemas HVAC y la incorporación de sensores, pueden reducir hasta un 45% las emisiones de carbono operacionales.
• Renovaciones medias: incluyen la instalación de energías renovables como paneles solares y almacenamiento de energía mediante baterías y microgrids.
• Renovaciones profundas: requieren una electrificación total del edificio, mejoras estructurales en la envolvente y sistemas de calefacción.

La implementación de estas estrategias permitirá avanzar hacia un modelo más eficiente y sostenible de desarrollo urbano. La digitalización de los edificios, junto con una gestión energética eficiente y un enfoque claro hacia la descarbonización, no solo contribuirá a la reducción de las emisiones de CO₂, sino que también ofrecerá beneficios económicos y operativos que mejorarán la competitividad del sector.